Así es como llaman algunos a La Habana, y no les falta razón. El estilo colonial de la ciudad, está fuertemente marcado por las columnas, que le dan un aire de recuerdo... Y a eso hay que sumarle el hecho de la influencia américana de los años 50 que le da un toque totalmente Hollywoodiense. La mezcla puede sonar explosiva, pero a la vista resulta realmente encantadora,como si se tratase de un extraño viaje a un pueblo maldito. Lo de maldito es porque, si viajase en el tiempo, viajaría a esa época de esplendor, pero cuando viajas a la Habana, la ciudad se encuentra un tanto derruida, intuyes todo, lo ves todo, pero en suc ara triste. Puedes imaginartela en sus momentos maravillosos, y no paras de enamorarte de ella, aunque no la veas con toda su magnificiencia. Hay zonas que estan restauradas y que enamoran deltodo. Y bueno, además está la gente, esa gente a la que terminas queriendo un montón, sobre todo a los que son mi familia de allí, que nos han cuidado y mimado como nadie.
Han sido unos días muy especiales y que he disfrutado muchísimo, y ahora solo tengo ganas de volver.
Os voy a dejar un video que grabé par qu eentendais un poco más mi amor por esta ciudad, aunque realmente, solo viendola se puede captar todo de ella.
Pau, Enamorada de La Habana
